16 de septiembre de 2007

Tokio Blues (Norwegian Wood)


Éste es uno de los libros que me han acompañado estas vacaciones y es que después de tanto oír hablar de Murakami, al final acabé picando de puro curiosa.

Con cierto temor a las represalias de los entusiastas de Murakami diré que es una lectura poco exigente, casi ligera, adictiva sí, pero incompleta por no dejar lugar a demasiadas ambigüedades (ésas en las que nos deleitamos algunos, lo siento, nunca llueve a gusto de todos). Y en contra de lo esperaba inicialmente (esto no me lo advirtieron en ninguna reseña), Murakami es un escritor muy occidentalizado. Aunque conserva el exquisito gusto oriental por la observación delicada y minuciosa.

En las formas, se entrevé su gusto por Salinger y Carver y en el contenido, recuerda inevitablemente a Thomas Mann y su montaña mágica. El corazón de esta novela es la esencia, el poso que destila su lectura: un estudio detallado, febril y angustioso de la fragilidad humana.

Siempre he pensado que el hombre es más fuerte y robusto de lo que se nos hace creer a través del arte o los foros de opinión. Por cierto, la lectura del libro "Optimismo Inteligente" de María Dolores Avia y Carmelo Vázquez (profesores de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid), apoya con estadísticas y análisis esta idea; así que se lo recomiendo a aquél que quiera discutir el tema consigo mismo. Pero qué poco literario es el ser humano fuerte y superviviente, ¿no? Como en el poema de Benedetti: sólo se escribe sobre las hojas caídas, no queda ni un verso para las hojas que tiemblan permanentemente en la rama. Éste es un libro sobre otoños de hojas muertas, sobre humanos torcidos (como los denomina uno de los personajes) que no encuentran acomodo en la realidad y es la historia de una elección: la de la fragilidad o la fortaleza. El traspaso de la frontera hacia la madurez. Porque al fin y al cabo, quizá para salvarse, la hoja sólo necesita decidirse a permanecer unida a la rama.

¿O no?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No conozco nada de este Murakami, aunque sí del otro Murakami (Ryu, para más señas). He oído hablar muy mal de Haruki, aunque tu comentario alivia un poco mi aprensión...

Besos

Anónimo dijo...

iaputa que bien escribes, q dan ganas de leer xD

Rosita Fraguel dijo...

Bueno, agente, tampoco te vayas a esperar nada del otro mundo, ¿eh?

Penyaskito... esto... ¿gracias? :P

Lucía dijo...

Hola, vengo desde Harmonia Macrocosmica y qué casualidad, estoy leyendo Norwegian Wood, de momento me parece el libro más centrado de Murakami. Si te gustan las ambigüedades lee "Crónica del pájaro que da cuerda al mundo", este seguro que no te decepciona.
Besos.